Estas Navidades, Aralab da un giro a las tradiciones navideñas. Hemos elegido árboles de Navidad vivos, símbolo de nuestro compromiso con el planeta. Pero el verdadero regalo llega después de las fiestas: nuestros árboles volverán a su hogar natural en un bosque o pinar portugués.
Este ciclo de celebración y conservación refleja nuestra dedicación al medio ambiente. El viaje de cada árbol desde nuestros salones hasta los bosques simboliza la esperanza y nuestro compromiso permanente con la sostenibilidad.
Apreciemos estos momentos de alegría, sabiendo que nuestras celebraciones contribuyen positivamente al bienestar de la Tierra. Juntos, estamos creando un legado de fiestas verdes para los años venideros.
